Estos animales son pintados a mano, con pinturas libres de plomo.
Se caracterizan por contar con muchos detalles que los hace súper realistas.
Los escultores y artistas, que tienen experiencia en diferentes animales y criaturas míticas, investigan y estudian meticulosamente la anatomía de cada animal antes de crear un modelo realista.
Luego, cada producto se fabrica a la imagen de ese modelo y se pinta a mano con delicadeza.